"Tengo dos palabras con las cuales dejarlos: inclusión y brillar", dijo McDormand al finalizar su discurso tras haber obtenido el máximo galardón a mejor actriz. Del drama a la vida, ¿qué tiene que ver eso con esto? Dos palabras que desde otra disciplina resuenan en la arquitectura. Incluir y Brillar, en principio no guardan relación una con la otra, pero luego una forma de interpretar (conjugando) es que al incluirnos como sociedad, liberamos el máximo brillo de nuestros potenciales. Y eso es un pequeño pero potente mensaje para la forma de interactuar en el ejercicio de nuestra profesión logrando mayor relevancia en la búsqueda del rol social.
Así, esta publicación incluye a mujeres de mentes brillantes que ejercen un importante rol en el país vinculando la arquitectura y el urbanismo con otras ramas. Aportan desde distintos ángulos: una desde la crítica, otra desde el arte, ella desde la educación, alguna desde el dibujo, pocas desde la historia… para enriquecer aún más esta profesión tan relacionada a las formas de vivir. Por el mes de la mujer, en honor a la diversidad y democracia, las integramos para compartir una reflexión sobre el devenir de la arquitectura en el Perú. Aunque diferentes –algunas abriendo mentes, otras generando conocimiento, y otras construyendo– tienen en común ese brillo en la mirada cuando hablan con solvencia de lo que hacen; y eso es lo que enmarcamos aquí.
Se trata de hacerles una misma pregunta que cada una responde desde su forma de ver y hacer arquitectura y urbanismo. Un intento de develar la influencia, filosofía y los lineamientos del trabajo que ponen en práctica y que podría darnos luces ante la realidad arquitectónica peruana de hoy, que tanto nos preocupa o a veces nos desorienta cómo seguir. Una pregunta amplia con una respuesta muy específica. Por lo que recomendamos leer atentamente estas líneas y atesorarlas como una directriz de consejos, reflexiones, mensajes para el futuro. A continuación, reflexionemos con ellas a través de sus respuestas a la siguiente pregunta:
Según tu opinión y experiencia personal, ¿en qué debería enfocarse el ejercicio de nuestra profesión para hacerse realmente relevante en el futuro para el Perú?
Sandra Barclay
Acaba de ser nombrada “Arquitecta del Año” por su trabajo en el Museo de Sitio de Paracas, realizado como socia fundadora de Barclay & Crousse. Su enfoque racional y sostenible se centra tanto en la relación con el paisaje como en el bienestar humano a través de la pertinencia del uso, espacio y luz. Su trabajo incluye una amplia gama de programas, el cual es reconocido nacional e internacionalmente. Entre sus proyectos, han construido una serie de casas en la playa, entre las que destacan la casa Equis. Otro proyecto renombrado es el Lugar de la Memoria, que obtuvo el Premio Nacional de Arquitectura "Hexágono de Oro" en el año 2014. Fue curadora del pabellón de Perú en la Bienal de Venecia 2016, obteniendo una mención especial. Se dedica a la docencia.
¿En qué debiese enfocarse la arquitectura para ser relevante en el Perú? En la calidad y en la generosidad urbana.
Debemos enfocarnos en cada proyecto en producir estos dos elementos, una arquitectura capaz de ofrecer calidad, bienestar, transformando la vida de las personas y una arquitectura capaz de ofrecer a la ciudad un espacio amable y generoso que nos permita relacionarnos más con ella.
"En cada proyecto construimos un pedazo de ciudad, tenemos la responsabilidad y a la misma vez la oportunidad de mejorar nuestra ciudad.
Si además pudiésemos encargarnos de aportar calidad en los proyectos de espacio urbano y edificios públicos podríamos llegar más lejos. Es importante volver a recuperar el sistema de concursos arquitectónicos para estos programas públicos que puedan asegurar una arquitectura de calidad para que nuestra profesión sea relevante en el futuro del país".
Maya Ballén
A partir del año 2005 vive en Lima donde desarrolla su práctica como arquitecta, artista y docente en la PUCP, en las facultades de Arquitectura y Arte. Sus proyectos han sido premiados en las Bienales de Quito, Lima e Iberoamericana. Ha desarrollado diversos proyectos de arquitectura en espacio público. Por un lado, el CREA del Parque Zonal Sinchi Roca en Comas, junto con MAS UNO STUDIO, proyecto actualmente en construcción. En la misma línea, participó en intervenciones en espacio público autogestionadas y también en el marco de la Noche en Blanco, como por ejemplo la propuesta "Sistemas de Riego", una reflexión crítica en torno a la conservación del patrimonio. Asimismo, ha realizado colaboraciones con artistas para Proyecto Amil.
Un día como hoy me pregunto: ¿cómo, desde la arquitectura, podemos pensar nuestras relaciones familiares?
"Me pregunto si las viviendas que habitamos han sido diseñadas por hombres y si podemos pensar una arquitectura feminista donde los roles domésticos son compartidos. Hoy tendemos a escapar de lo doméstico, me pregunto si puede ser atractivo", continúa reflexionando.
Es posible pensar la casa como algo más vinculado con la energía del trabajo. Quizás un trabajo/mundo/futuro más femenino. Que la energía y los tiempos de la crianza no estén tan desvinculados de ese mundo masculino del trabajo que hemos conquistado. Que feminicemos ese orden masculino del trabajo y se masculinice lo doméstico. Quizás la arquitectura no tenga nada que ver con todo esto, pero toca pensarlo.
Claudia Amico
Arquitecta con amplia experiencia en la gestión y dirección de proyectos urbanos desde un enfoque de desarrollo social. Ha desempeñado, en base a sus investigaciones, un rol de difusión importante sobre temas relacionados a la arquitectura y la ciudad al ser conductora del reconocido programa de televisión UMBRALES Arquitectura y Urbanismo en TV Perú, único en su género. Tras una larga experiencia en la docencia, su gran interés por los trabajos interdisciplinarios la ha llevado a organizar y dirigir talleres, entrevistas y charlas de nivel internacional. Ha realizado diversas intervenciones en el espacio público desde distintos ámbitos como co-fundadora y directora de Espacio Expresión, destaca su trabajo participativo en la ciudad de Pisco después del terremoto del 2007. Es arquitecta asociada de XUD Arquitectura.
Hay una larga lista de temas pendientes en el Perú que se repite año a año y pienso que lo siguiente es lo que debería resonar más en los oídos de los arquitectos y arquitectas:
- Vivienda adecuada para los de menos ingresos.
- Para estas viviendas, una ciudad con espacios de calidad, democrática y accesible que se piense y no se construya a base de mafias de tráfico de terrenos.
- Para estas ciudades, una mayor comprensión del territorio y el paisaje que las torne más inteligentes y resilientes ante los desastres y el cambio climático.
"Sin embargo, para que nuestra profesión sea realmente relevante atendiendo estos temas, el cómo va más allá del qué… Porque los arquitectos debemos cambiar y desafiar nuestro estereotipo de ‘hacedores’ de planos de casas y decoradores...", reflexiona Claudia.
Debemos ser más políticos, meternos a trabajar con municipalidades y debatir con el sector público. Debemos tener una gran sensibilidad hacia la injusticia y la necesidad y debemos sentir una vocación por hacer algo al respecto, aunque sea algo pequeño. Debemos asumir retos, emprenderlos con confianza y empoderarnos con humildad, aprendiendo el valor de las pequeñas acciones y de lo cotidiano.
Cristina Dreifuss
Arquitecta especializada en teoría, historia y crítica que disfruta y transmite su placer por investigar, viajar, escribir y enseñar. Desde hace dos años co-organiza el importante, y único en su tipo, Concurso Nacional de Critica Arquitectónica con lo que fomenta el espíritu crítico joven. Se desempeña como arquitecta investigadora en temas relacionados con la estética, el urbanismo y la arquitectura popular. Publica artículos en diferentes medios y ha expuesto los resultados de sus investigaciones en eventos tanto en el Perú como en el extranjero. Ejerce la docencia en la UPC, UNI y la ULima. Dirige su blog “divagarquitectura" y “arquitecturahuachafa”.
Podríamos proponernos conocer, a fondo, dónde y con quiénes estamos trabajando. Vivimos en un momento que se apoya en imágenes vistosas y medias verdades. La profesión del arquitecto no puede construirse así. Si queremos ser relevantes, tenemos que hacernos relevantes, lo que empieza por saber a qué carencias nos enfrentamos y con qué recursos disponemos.
"Parecería que la velocidad de la construcción está superando a los valores éticos de la arquitectura, y que nuestro rol cae, irremediablemente, en la replicación mediocre de formas y fórmulas, y en buscar la máxima rentabilidad por metro cuadrado. Los resultados son irrelevantes o, peor aún, nocivos para la gente y las ciudades", agrega.
Convendría enfocarnos en reconocer que los arquitectos no somos solitarios genios incomprendidos. Tampoco salvaremos el mundo. Pero en el diálogo, la multidisciplinariedad y la interculturalidad, sí podemos encontrar una voz que apunte a soluciones.
Sólo si tomamos al otro y a su realidad como punto de partida, vamos a poder responder adecuadamente y, por lo tanto, ser los profesionales de servicio que estamos llamados a ser.
Marta Maccaglia
Arquitecta Italiana que ha hecho patria en el Perú. Con su trabajo social e interdisciplinario, impacta fuertemente en el desarrollo de los espacios educativos del país. Hace 4 años dirige la asociación sin fines de lucro “Semillas” llevando a cabo proyectos de diversas escuelas en la selva central beneficiado a las comunidades y al medio ambiente. Desde el 2011 trabaja en proyectos de cooperación internacional en Perú, colaborando con diversas ONG. La Escuela secundaria de Chuquibambilla fue proyecto ganador del segundo premio mundial en Hábitat social y desarrollo en la Bienal de Quito 2014. Ejerce la docencia en la universidad UCAL.
Me encanta esa frase de José Maria Arguedas que dice: "No, no hay país más diverso, más múltiple en variedad terrena y humana: todos los grados de calor y color, de amor y de odio, de urdimbres y sutilezas, de símbolos utilizados e inspiradores..", es completamente cierto y a esta pregunta tan amplia y profunda ¿cómo se puede contestar en pocas palabras?
"En un país como el Perú tan diverso, tan bello y a veces tan injusto, no podemos apagarnos detrás de un escritorio, debemos explorar, conocer y repensar la arquitectura y el rol que tenemos. Debemos conocer a las personas y los contextos donde operamos para diseñar espacios que sean coherentes a la ética, el espíritu y la cultura de cada sociedad. No existe un recetario o una fórmula para hacer arquitectura, deberíamos recuperar la capacidad de escuchar y respetar al mundo; regalar a las personas espacios de calidad y de oportunidad!", agrega.
Creo que en general se debe recuperar el ROL SOCIAL de la arquitectura, ¡la arquitectura como LUGAR de ENCUENTRO!
Adriana Scaletti
Sus cocimientos e investigaciones sobre historia, patrimonio, arquitectura y arte contagian a intervenir con mayor cuidado en la ciudad. Trabaja como arquitecta especializada en Restauración de Monumentos y en Historia del Arte y Gestión Cultural. Es miembro de número de ICOMOS Perú; de la Asociación de profesionales Patrimonio y Sitios; del Instituto de Investigación de la Arquitectura y la Ciudad; y del Instituto Riva-Agüero. Ha realizado diversas investigaciones y publicaciones, su último libro sobre balcones: "Miradas en el aire", ha sido publicado con el grupo de investigación de Patrimonio Arquitectónico PUCP, del cual es coordinadora. Asimismo, es docente asociada de diferentes cursos relacionados al tema, en la misma casa de estudios
Yo trabajo con el pasado. Más claramente, me preocupa el futuro del pasado, y trato de ocuparme de ello en el presente.
"De entre la infinita variedad de posibilidades que la arquitectura puede ofrecer para crear el futuro que queremos para el Perú, mi experiencia ha pasado por valorar lo que nos hace únicos y excepcionales de nuestra historia construida -desde los detalles hasta los espacios monumentales- y ver la manera de que se transmitan al futuro, haciéndose útiles en el presente", enfaliza Adriana.
Creo que en nuestro país, tal vez más que en otros, este (nuestra historia construida) es un tema absolutamente imprescindible, que puede ser ya no solo un éxito necesario en términos de identidad y cultura nacional, si no también un impulso, una herramienta hasta ahora desaprovechada en términos de desarrollo sostenible.
He tenido la fortuna de poder transmitir esta perspectiva a nuevas generaciones de la profesión, y la felicidad de verlas trabajar efectivamente, luchando mucho todavía, por ello. Así que ese impulso, espero, se está dando- creo que si se potencia como debe, veremos grandes cosas", puntualiza.
Patricia Ciriani
Historiadora del arte y la arquitectura, que al interrelacionar ambas ramas, brinda en cada una de sus intervenciones visiones críticas y nuevas perspectivas, nutriéndose de sus estudios sobre el Urbanismo. Con amplia experiencia, se dedica enérgicamente a la organización de variadas exposiciones, publicaciones, eventos y programas de radio; que en diferentes oportunidades ha llevado a cabo en París, Barcelona y Lima. En nuestra capital, ha sido curadora de las recordadas exposiciones "Doble horizonte" (2013) y "De la huaca al boom” (2015), de gran aporte porque estrechan puentes entre el pasado/presente/futuro y nos elevan la mirada sobre el crecimiento de la ciudad. Ejerce la docencia en la PUCP y la FAUA UNI
La arquitectura está hecha para los que la habitan, el urbanismo para los que viven en las ciudades o las atraviesan. Algo tan obvio no se está practicando en la actualidad en el Perú, ni para los ricos ni para los pobres.
"Por más boom inmobiliario que haya, la calidad de la construcción es más pobre y sosa que en los años 1940 o 1960, hecha muy rápidamente según tipologías repetitivas que no consideran el entorno. La calidad espacial interior de las viviendas no se considera en el 70% de las construcciones que son informales y hechas por la supervivencia, ni tampoco mucho en el 30% restante que conciben los arquitectos formados en escuelas", define Patricia.
Pocas escuelas de arquitectura del Perú –y menos aún los proyectos inmobiliarios están enfocados en las cuestiones de espacio, en la relación interior-exterior, el manejo del color y de la luz, la elección de los materiales, la ergonomía, como tampoco en las mil maneras de habitar que tienen las poblaciones de nuestras ciudades.
"Para lograr este enfoque orientado hacia el uso y no exclusivamente hacia la rentabilidad comercial, se debe favorecer una formación arquitectónica interdisciplinaria, donde los artistas, los historiadores y los antropólogos sean co-participes de la formación, a la par con los ingenieros. Y votar por mejores políticos, que pongan en acción leyes del suelo que favorezcan al ciudadano en vez de al empresario transnacional que no vive aquí. Los arquitectos, los artistas, los historiadores, los antropólogos y los filósofos deben involucrarse activamente en la política para pensar ciudades en función de sus habitantes. Y eso no sólo en Lima sino en todo el país, para que no dependan las regiones de que les lleguen arquitectos de la capital a mostrarles modelos inadaptados a su clima. Más bien al revés:...", agregando:
...que la costa, sierra y selva inventen nuevos modelos que sirvan para el mundo más allá de Lima, pues la riqueza fabulosa de nuestra geografía es un aliento para la creación.
Marianne Trauten
Arquitecta y terapeuta que ejerce la profesión desde una experiencia muy humana, trabajando con/para grupos humanos y desde lo más interior del ser humano, integrando su enfoque espiritual. Dirige Construye Identidad , iniciativa de un grupo de jóvenes arquitectos que recorren costa, sierra y selva investigando las formas tradicionales de construcción para preservarlas, reinterpretarlas, y aplicarlas a nuestros días, con un proceso interdisciplinario y participativo. Un destacado proyecto es el colegio secundario en la comunidad nativa de Alto Sondoveni, en Satipo, Junín. Desde el 2015 incluye sus herramientas del campo terapéutico en su experiencia arquitectónica en campo, pues trabaja en proyectos de desarrollo con comunidades rurales en distintos lugares del mundo. Actualmente dicta talleres y desarrolla junto a su equipo la investigación “a través de las selvas del mundo”.
Creo que muchos de los problemas que enfrenta el país partieron en algún punto de decisiones humanas. Esto significaría que para cualquier profesional interesado, comprender la complejidad del ser humano daría luces sobre las variables a considerar en la formulación de posibles soluciones.
"Es por ello que como arquitecta y terapeuta promuevo que todo el que pueda se embarque en un proceso terapéutico de sanación y autoconocimiento con el fin de poder tomar la vida con más fuerza y que el abrazar nuestra propia vulnerabilidad nos genere un campo fértil para conectar de una forma más profunda, sincera y sabia con las personas con y para las cuales proyectamos. El Perú necesita arquitectos emocionalmente saludables que no tengan miedo de apostar por sus propios caminos para dejar que su luz brille e ilumine el mundo", define Marianne.
Creo que el ejercer la arquitectura en sí nos viene con una gran responsabilidad pues tener herramientas para intervenir en la experiencia de habitar la vida y la naturaleza es algo sagrado. Somos inherentemente naturales pero en estos tiempos acelerados lo hemos olvidado e invito a que usemos la arquitectura como un camino espiritual hacia recuperar esa conexión con este planeta hermoso que pide a gritos volver a ser escuchado. Y, si no sabemos cómo empezar, sentémonos a escuchar las historias de nuestras comunidades campesinas e indígenas, pues ellas jamás la perdieron.
Mayra Vila
Arquitecta que trabaja por la educación; en la gestión pública, en la docencia y en proyectos más específicos. Se ha desempeñado como responsable de infraestructura de la Dirección General de Educación Básica Regular del Ministerio de Educación; donde destacó por liderar la elaboración de los “Lineamientos para la organización y funcionamiento pedagógico de Espacios Educativos de Básica Regular”. Marcó un hito importante al ser la primera arquitecta en exponer en el CADE 2017, pues se puso sobre la mesa del principal foro empresarial del país la importancia del espacio para la educación, buscando solucionar una problemática nacional y formalizando así la nueva visión de los espacios educativos que ya se vienen experimentando. Todo esto define el camino a más interdisciplinariedad de nuestra profesión.
Las personas buscan arquitectos para que aterricen sus necesidades, y los arquitectos buscamos transformar modos de vida a través de la creación de espacios que permitan el desarrollo de las personas. Ello requiere consensos de cómo queremos vivir y convivir en los espacios que estamos proyectando, lo cual implica escuchar, proponer y en ese camino aceptar que no solo es el arquitecto sino una construcción conjunta con diversos actores de la sociedad lo que permitirá llegar a un consenso y eso es hacer política.
"El principal reto que tenemos es mirarnos y reconocernos entre arquitectos, y a partir de ello aceptar lo que ya venimos aportando para el desarrollo del país. Y así, aceptar que es solo en un proceso de construcción conjunta, de un trabajo colaborativo y transdisciplinar, que podremos proponer arquitectura que sirva y sea exitosa en su uso y gestión. Y es que el espacio es un tercer maestro, te brinda oportunidades o te limita, te sensibiliza o te vuelve insensible, promueve nuevas interacciones o las cancela", agrega.
Por ello articularnos con otras profesiones es vital, y para ello nos toca plantear lo que como arquitectos podemos aportar, y en ese proceso permitirnos redescubrir aquellos ámbitos donde hay que decir algo desde el espacio. Para mí, hacer arquitectura es un trabajo no solo de arquitectos, y ser arquitecto no significa solamente hacer arquitectura.
Karina Puente
Una arquitecta que dibuja ciudades y crea paisajes. Su pasión por la ciudad es tanta que a través de la ilustración plasma detalladamente en tinta las “Ciudades Invisibles” de Ítalo Calvino, 21 de 55 hasta el momento, producto de casi tres años de trabajo que se nutre del arte, literatura, juego e infancia, ha sido expuesto nacional e internacionalmente en publicaciones/exposiciones. Por otro lado, destaca por haber liderado el diseño urbano y desarrollo del Proyecto “Parque Ecológico Nacional Antonio Raimondi” en Ancón, aplicando conceptos de diseño urbano sostenible, con el cual obtuvo el Hexágono de plata en la categoría Urbanismo en la XVII Bienal Arquitectura del Perú 2016. El año pasado, obtuvo el primer puesto en el Concurso Nacional de Ideas - Alameda Clodoaldo Espinoza Bravo, para el centro histórico de Jauja, Junín. Dirige su estudio PUENTE arquitectura y diseño urbano.
La capacidad de crear es uno de los aspectos que considero más importantes en absolutamente todo lo que hace el ser humano. Y con esto me refiero al poder responder de forma precisa, espontánea y genuina a cualquier encargo o problema que se presente con el objetivo de mejorar los lugares donde vivimos. En mi caso ya sea que la respuesta requiera de un proyecto de arquitectura, de diseño urbano, una pieza de arte o una ilustración.
"Habiendo dicho esto, creo que en nuestra realidad no se llega entender el valor que tiene el diseño y la creatividad en mejorar la vida de las personas. Buen diseño en cuanto a la búsqueda de calidad, estética, economía y valoración del medio ambiente natural y construido. Pero sobre todo, buen diseño para resolver todo lo que hacemos en relación a la ciudad, sus dinámicas, su forma y su gente. Creo también que como sociedad aún vemos la arquitectura como objeto aislado desligado de lo urbano. Por eso toda reflexión que hago parte desde allí y alimenta continuamente mi trabajo como arquitecta", acota.
Pienso que la manera en la que vivimos en la ciudad es el tema del futuro, no solo en Perú sino en el mundo entero. Pero también lo es el rescate de los valores esenciales del ser humano y en eso creo que el arte juega un papel fundamental. Por eso dibujo ciudades, las conceptualizo y las pinto cada vez que puedo. Cuando ilustro ocurre una metamorfosis. Supongo que es la transformación de la arquitecta, tratando de rescatar sus propios valores esenciales sobre un papel, en una artista que interpreta ciudades imaginarias.
Marianela Castro De La Borda
Este año tiene un relevante rol como curadora del Pabellón Peruano para la Bienal de Arquitectura de Venecia 2018, con el proyecto “En reserva” que destaca por proponer diálogos con otras artes como la escultura, literatura y poesía; con lo cual nos invita, junto con su equipo curatorial, a ver con otros ojos el potencial de las huacas prehispánicas para repensar el espacio público. Por otro lado, es directora de un estudio de diseño interdisciplinario, FANCYSTUDIOLIMA, dedicado a la creación de proyectos urbanos, arquitectónicos, comerciales y productos. Tiene gran interés por el urbanismo, es miembro del Laboratorio para la Ciudad en la ULima.
En cuestionar los límites. Los físicos, con los que definimos las formas de estar en los espacios, los de la disciplina y finalmente los límites mentales que empiezan a difuminarse al formular más preguntas que respuestas.
"Hemos hecho de los lugares donde vivimos espacios excluyentes que se definen desde donde empieza el muro hacia adentro. Los arquitectos tenemos una oportunidad enorme para contribuir a integrarnos como sociedad, en los espacios de encuentro colectivo. Hay una gran posibilidad en mejorar la forma en que vivimos, investigando y diseñando los espacios intermedios y los espacios públicos. Los primeros para generar pertenencia tanto en un espacio construido como en uno abierto y los segundos porque nos permitirían aumentar la confianza entre nosotros, asegurando nuestra convivencia", continúa Marianela.
"Integrar nuevas disciplinas a la arquitectura, así como vincular las ramas dentro de la arquitectura son otra forma de cuestionar estos límites. El diálogo interdisciplinar genera nuevas preguntas que nutren a la arquitectura y a la vez promueven respuestas diferentes. El ámbito de nuestra disciplina es el espacio e integrar otros puntos de vista enriquece nuestro entendimiento pero también nos pide enfocar constantemente nuestro quehacer. De la misma manera si lográramos conectar las diferentes ramas de la arquitectura para construir un discurso y una práctica coherentes a diferentes escalas, fortaleciendo nuestra disciplina", agrega.
Finalmente necesitamos ejercitar nuestra capacidad para hacernos más preguntas.Dejar de ser una disciplina reactiva que solo responde a lo que se le pide y más bien estar atentos a los cambios de la sociedad y promoverlos desde la arquitectura.
"Los arquitectos necesitamos reforzar nuestra capacidad para observar y escuchar, habilidades que hoy parecen ser más automáticas que provocadas. Para que exista buena arquitectura tenemos que incrementar nuestra capacidad de comunicación y fomentar que se entienda por qué cuando hablamos de arquitectura existe la posibilidad de vivir mejor", finaliza.
Mariana Alegre
Urbanismo social: defiende el derecho a la ciudad para una sociedad más integrada. Estudió Derecho, encontrando su pasión en los derechos urbanos; por lo que se especializa en Diseño de Ciudades y Ciencias Sociales. Es la coordinadora general del observatorio ciudadano Lima Cómo Vamos, que contribuye a mejorar la calidad de vida de los limeños y promueve junto a su equipo la estrategia Ocupa Tu Calle que busca recuperar y generar más espacios públicos a través de intervenciones urbanas llevadas a cabo como trabajos colaborativos con diversos aliados. Destaca el primer parklet de Lima y la Plazoleta de la Integración, primera intervención urbana en el centro histórico del Rímac. Escribe una columna en Perú 21 donde crítica y propone soluciones para la ciudad de Lima. Es Coordinadora de la unidad de Gestión Social y docente en otros cursos de la PUCP.
La arquitectura, al igual que muchas otras profesiones, ha sido principalmente masculina. Esto ha llevado a que los referentes principales sean hombres y a que el diseño urbano no tenga un enfoque de género que recoja las necesidades particulares de las mujeres.
Por ejemplo, nuestra última encuesta Lima Cómo Vamos confirma lo que ya se sabe: las mujeres caminan más que los hombres, alcanzando un 84% en el Callao. Así también, son los hombres los que más utilizan el auto en Lima y Callao. Estos patrones, sustentados en evidencia, no han sido considerados para el diseño de las ciudades. Del mismo modo, los deberes de cuidado -que debieran ser compartidos por igual entre hombres y mujeres- recaen aún, principalmente, en las mujeres y estos no están debidamente incorporados en las ciudades para facilitar a las mujeres los traslados en condiciones de comodidad", reflexiona.
Entonces, cuáles son los retos de la profesión: visibilizar a las mujeres en el diseño y también promover a las mujeres arquitectas y urbanistas en roles de exposición pública, de liderazgo y de participación.
Las ciudades las compartimos y nos toca promover una mayor igualdad.
Elizabeth Añaños
Dirige su trabajo como arquitecta y urbanista hacia el desarrollo y la inclusión social. Se ha desempeñado en la gestión pública como jefa de Infraestructura del Plan Selva en el Ministerio de Educación del Perú, proyecto estatal para construir escuelas públicas según las necesidades en la selva; esta propuesta representó al país en la Bienal de Venecia 2016. Fue coordinadora de Ordenamiento Territorial en el PLAM 2035, Plan Metropolitano de Desarrollo Urbano de Lima-Callao. Fue fundadora del taller Cotidiano y del colectivo Posiciones de Emergencia Bogotá y Lima. Su proyecto del colegio Santa Elena de Piedritas, en Piura representó al país en la Bienal Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo, 2014. Ejerce la docencia.
El ejercicio de nuestra profesión debería re-enfocarse en la práctica misma de la arquitectura.
"Si los arquitectos pondrían más detalle, cabeza y rigor en hacer un encargo, sea cual sea la tipología y escala, se estaría mejorando la calidad de vida de los usuarios. Eso crea valor de la arquitectura en la sociedad. Y esto es lo que falta, la arquitectura aún no es un valor en la sociedad peruana, la arquitectura tiene que empezar a discutirse, a comunicarse, se debe empezar a hablar de arquitectura como parte de la cultura de nuestra sociedad" reflexiona y continúa:
"A lo que voy, es que no hay que enfocarse en un tipo de arquitectura para hacer algo relevante en el futuro del País. Considero que lo mejor que pueden hacer los arquitectos es, desde su trinchera, desde su contexto, hacer la arquitectura más coherente y responsable", agrega.
Esto no quita que los arquitectos asumamos un rol en la agenda futura del país, que además va a estar condicionada a las problemáticas globales que van a impactar en la práctica de la arquitectura. Es ahora cuando debemos estar más atentos y anticipar estrategias a los nuevos retos que vienen, sin perder de vista los campos de acción que se tienen que cubrir actualmente en el Perú.
"La brecha de infraestructura pública es gigante y se hacen cosas cada día, pero sin arquitectura. La pregunta es ¿cómo se puede hacer arquitectura en un país en donde la arquitectura no tiene valor?
Es por eso que la buena arquitectura tiene que ser efectiva, inteligente y cambiar la vida las personas, para que no sea un accesorio sino un componente importante de la vida misma en la sociedad; para eso, la arquitectura debe ser proactiva y acercase a la sociedad.
Ahí es cuando los arquitectos deben tomar otros roles, otro lenguaje, para tomar decisiones más importantes e impactar en las políticas públicas y emprendimientos privados de mayor alcance", finaliza.
Agradecimiento especial a cada una por responder, por permitirnos lograr esta integración de sus valiosos puntos de vista, reafirmando la diversidad y complementándola. El resultado de la unión de estas reflexiones es una gran respuesta a la pregunta que aquí nos reúne; pues es un ejercicio de sororidad, de mujeres cómplices hacia un mismo fin, donde a través de esta inclusión se aprende del compañerismo entre ramas afines. Sus posturas críticas, y no pasivas, claramente accionan con un impacto positivo para el país. Nos dejan reflexionando en nuestro rol social, en la disciplina en sí misma así como en la interdisciplinariedad, en la generosidad y conciliación, en la descentralización y las tradiciones, en el ser humano y sus relaciones, en nuestra historia, y tanto más.
Finalmente, otra respuesta a la pregunta, desde un rol personal donde se puede hacer arquitectura con las palabras y con ellas transmitir arquitectura, es considerar que el ejercicio de nuestra profesión puede tener un importante enfoque en difundir estos mensajes que poco a poco van concientizando y re-humanizando, para el presente y por ende futuro que hay que cuidar desde nuestra forma de mirarnos y tratarnos, de transmitir lo que pensamos y de compartir acciones integradas. Una humilde conclusión.
Nota: En diverso orden, hemos presentado una selección de 13 reflexiones de mujeres destacadas en el campo de la arquitectura, que aunque no son las únicas, consideramos ejercen un importante rol en la arquitectura del país enriqueciendo su enfoque con distintas disciplinas.